viernes, 11 de marzo de 2016

El poder de la constancia

He estado hablando con una persona que quiere perder peso, lleva tiempo intentándolo y no lo consigue. Fue a una endocrina para perder peso y que cuando vio que la endocrina estaba gorda decidió no hacer mucho caso, es como si un calvo te vende crece-pelo. Me ha dicho que va a probar unas pastillas recomendadas por una amiga, que además cuestan una pasta y me pregunta qué opino.

Las pastillas no son de las que recetan los endocrinos, con lo que coincidimos en que igual no es buena idea, nunca sabes que efecto pueden tener a largo plazo (ni siquiera a corto plazo). Afortunadamente las pastillas van acompañadas de ejercicio y dieta y el tratamiento dura tres o cuatro meses (el ejercicio y la dieta pueden marcar la diferencia)

Estoy convencido que en esos cuatro meses bajará de peso. El precio de las pastillas ayudará a mantener la motivación y la constancia para hacer ejercicio y comer de forma más saludable. Incluso los días que no apetezca hacer deporte y apetezca más darse un atracón. Quizá las pastillas solo tengan efecto placebo.
Foto de jmacpepe
Creo que la respuesta está en la constancia, en proponerte un objetivo, tener un buen porqué para ir a por ello y trazar un plan que te lleve hacia la meta. Después sólo queda la perseverancia para mantenerte en el plan y estar cada día un paso más cerca del objetivo.

He escuchado a Francisco Alcaide (@falcaide) decir que las dificultades están para distinguir los que dicen que quieren conseguir algo de los que realmente lo quieren. No todos los días apetece lo mismo, no siempre cuesta lo mismo, si realmente quieres conseguir el objetivo encontrarás fuerzas para mantenerte en el camino para conseguirlo.

Lo difícil es empezar, después es más fácil mantener los buenos hábitos. Hacer deporte de forma regular durante la semana te va a costar las primeras semanas si no hacías deporte, al cabo de dos meses si no haces ejercicio el cuerpo te va a pedir que te muevas. La constancia crea los hábitos para sea más fácil seguir, la clave es crear buenos hábitos.

Adelgazar también tiene que ver con el tiempo. Si acostumbras a comer rápido y estás 30 minutos comiendo comerás más que si comes más despacio. Un buen ejercicio para comer menos es apoyar el tenedor o la cuchara cada vez que te llevas un bocado a la boca.

Por otra parte la señal de que estamos llenos, de que hemos comido lo suficiente, tarda en llegar unos 15 minutos al cerebro. Si comes rápido puedes ingerir muchas calorías en esos 15 minutos. Por eso recomiendan parar de comer antes de sentirnos llenos.

En algunos casos tenemos que estar dispuestos a ir en contra de nuestra educación. Puede que nos hayan educado a acabarnos el plato, aunque ya estemos llenos. Puede que nos hayan empujado a comer el último filete para que no sobre ¿Cuál es el problema de guardarlo para mañana?

En resumen:
  • Ponerse objetivos y encontrar un buen porqué para conseguirlos (si tienes el por qué encontrarás el cómo).
  • Diseñar el plan para conseguir el objetivo.
  • Constancia para seguir el plan. La perseverancia hace cambiar malos hábitos por buenos (dieta, comer despacio y ejercicio).
  • Darse cuenta y cambiar creencias que nos limitan (acabarse el plato).
  • Hacer público el objetivo puede ayudar.

Los que me conocen saben que tengo cierto sobrepeso, así que este artículo puede hacer algo de gracia. Voy a aprovecharlo para hacer público el objetivo de bajar a 92 kilos este año 2016. El hacer público los objetivos ayuda a conseguirlos, así no tienes que soportar la vergüenza de no cumplir.

Si conoces a alguien con sobrepeso le puedes enviar el post, en los comentarios podéis hacer públicos vuestros objetivos para el 2016. En esta caso mejor objetivos de medio-largo plazo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario